LENTILLAS PROGRESIVAS
Las lentes de contacto o lentillas permiten ver bien a las personas que tienen algún problema visual sin la necesidad de utilizar gafas graduadas. Como ya sabéis las lentillas se colocan sobre la capa lagrimal del ojo que cuida y lubrica la córnea. Es un producto extremadamente delicado, por lo que hay que seguir un serie de normas como la limpieza de manos antes de tocarlas, la lubricación de las mismas y el tiempo máximo de utilización al día.
¿Qué son las lentillas progresivas?
Una vez descrita la teoría básica de las lentillas, vamos a explicar qué son y para qué sirven las lentillas progresivas.
Además de llamarse lentillas progresivas, también se les conoce con el nombre de lentillas multifocales. No son muy conocidas entre la gente pero son de gran utilidad para corregir diferentes problemas de vista.
Las lentillas progresivas siguen el mismo método que las gafas progresivas, por lo que están indicadas para personas que sufren miopía y otra patología a la vez, como presbicia. Son menos conocidas, ya que la mayoría de gente que lleva lentillas solo sufre de miopía o astigmatismo por separado. Como las lentillas tradicionales, existen diferentes tipos de lentillas progresivas
Tipos de lentillas progresivas según su duración
Lentillas progresivas diarias. Este tipo de lentillas no son las más habituales, ya que después de utilizarlas una vez, se desechan.
Lentillas progresivas semanales. Estas lentillas duran aproximadamente una semana o incluso estirando su uso pueden llegar a durar dos semanas. Este tipo de lentillas y las diarias no suelen encontrarse fácilmente en las ópticas.
Lentillas progresivas mensuales. Estas quizás sean las lentillas que más abundan entre la gente. Su popularidad se debe a que son cómodas, duran bastante tiempo sin estropearse y son las que más se fabrican.
Lentillas progresivas anuales. Al igual que las diarias y semanales, este tipo de lentillas son menos habituales, ya que su coste es mayor y no son tan cómodas como las anteriores.