REVISIÓN VISUAL EN MADRID
La mayoría de las personas solemos acudir a hacernos una revisión visual cuando tenemos un problema de visión. O, mejor dicho, cuando somos conscientes de que tenemos un problema. Y es que, en muchas ocasiones, no sabemos que algo no funciona bien hasta que el problema se hace evidente.
Para poder adoptar la mejor solución, es necesario detectar el problema lo antes posible y determinar qué puede estar causándolo. Por este motivo, es aconsejable la realización de revisiones visuales periódicas. Especialmente a partir de los 45 años.
Las lentillas diarias de Óptica Lince están fabricadas con los mejores materiales, para poder cumplir los altos estándares que tienen cada productos de nuestra tienda. Esto ayuda a que puedas cuidar la salud de tus ojos con unas lentillas de alta calidad, no importa si compras lentillas de suo diario o lentillas mensuales.
La revisión visual es un examen de la vista. Los médicos especialistas de la visión son los oftalmólogos que se encargan del diagnóstico y tratamiento de las patologías relacionadas con los ojos y la visión.
Los ópticos-optometrista no son médicos, pero son profesionales que pueden prevenir, detectar y solucionar problemas visuales. Los ópticos-optometristas están capacitados para llevar a cabo pruebas visuales y analizar los resultados con el fin de determinar el estado de salud de los ojos.
Las ópticas, por lo tanto, son lugares a los que puedes acudir a realizar una revisión visual. El examen se lleva a cabo a través de la realización de diferentes pruebas visuales. Son pruebas rápidas, sencillas e indoloras.
Pruebas del examen visual
En función de las necesidades del paciente, se pueden realizar diferentes pruebas visuales:
Tonometría: es un examen mediante el cual se mide la presión intraocular. Se utiliza para detectar el glaucoma, una patología del nervio óptico que provoca pérdida de visión. Si se detecta a tiempo se puede evitar la ceguera en un 95% de los casos.
Topografía: es una prueba diagnóstica no invasiva que se emplea para conocer las características de la córnea; su espesor, curvatura, elevación, potencia y relieve. Permite al profesional determinar la idoneidad de diferentes lentes de contacto.
Retinografía: es una fotografía de la retina, la capa de tejido más interna del ojo. La retinografía es una prueba sencilla, rápida e indolora que puede detectar la aparición de algunas enfermedades y de la ceguera.
Campimetría: también llamada perimetría visual, es un examen que se utiliza para valorar las alteraciones del campo visual. Se utiliza principalmente para realizar el control del glaucoma y de otras enfermedades de la retina, como la retinosis pigmentaria.
Agudeza visual: Se analiza la vista a distintas distancias utilizando una tabla, denominada de Snellen, que se sitúa a 6 metros de distancia de la persona.
Con los resultados de las diferentes pruebas, el óptico-optometrista puede saber el estado de salud de los ojos y, en función del mismo, detectar si existe una patología ocular que afecte a la vista. Las personas con tensión ocular, diabetes o alta miopía deben hacer un seguimiento de su salud visual de manera periódica.
También es conveniente acudir al oftalmólogo si detectamos dolor de ojos, lagrimeo o dolor de cabeza tras una jornada laboral.
Ven a Óptica Lince tu óptica en Madrid para realizar tu examen visual.