GAFAS PROGRESIVAS

Las gafas progresivas son un tipo de lentes correctivos que se utilizan para corregir problemas de visión cercana y lejana. Están diseñadas para proporcionar una visión nítida y clara en todas las distancias, sin necesidad de cambiar de gafas.

Las gafas progresivas se utilizan para corregir problemas de visión como la presbicia, que es la disminución de la capacidad de enfoque cercana que ocurre con la edad. También se pueden utilizar para corregir otros problemas de visión como la miopía, la hipermetropía y el astigmatismo , también en combinación con la presbicia.

¿Cómo funcionan?

 

Estas gafas son una combinación entre unas gafas para ver de lejos y unas gafas de lectura. No poseen líneas divisorias, por ende, tienen una progresión integrada para todas las distancias. 

 

Así, evitan que la persona se maree al mirar entre variaciones en la distancia.

Las gafas progresivas tienen tres zonas de visión:

 

 

Zona de visión lejana: esta zona se encuentra en la parte superior de las lentes y se utiliza para ver de lejos.

 

Zona de visión intermedia: esta zona se encuentra en la parte central de las lentes y se utiliza para ver a distancias intermedias, como al conducir o trabajar en una computadora.

 

Zona de visión cercana: esta zona se encuentra en la parte inferior de las lentes y se utiliza para ver de cerca.

La transición entre las diferentes zonas de visión es gradual y no hay una marcada división entre ellas como hay en las gafas bifocales. Esto hace que las gafas progresivas sean más naturales de usar y menos evidentes.

 

Cuando se usan gafas progresivas, los ojos se centran en diferentes distancias dependiendo de la zona de visión que se esté utilizando. Por ejemplo, cuando se mira hacia arriba para ver de lejos, los ojos se centran en la zona de visión lejana de las lentes. Cuando se mira hacia abajo para ver de cerca, los ojos se centran en la zona de visión cercana de las lentes.

 

Es importante tener en cuenta que las gafas progresivas pueden tomar un tiempo de adaptación y no son en todas las ocasiones la mejor opción en todos los casos. Algunas personas pueden encontrar dificultades para enfocar en la zona de visión intermedia y pueden llegar a tener algún pequeño mareo o problemas para ver con claridad. Es importante consultar con un profesional de la salud visual para determinar si las gafas progresivas son la opción adecuada para su caso.

¿Cuándo se necesitan gafas progresivas?

Se recomiendan en particular para personas que tienen dificultad para ver tanto de cerca como de lejos y que quieren una solución de lentes que no “se noten mucho” como ocurre con las bifocales. Esto suele ocurrir con la edad, cuando se produce una disminución de la capacidad de enfoque cercana , o sea, presbicia.

 

También pueden ser adecuadas para personas que realizan actividades que requieren una visión intermedia, como conducir o trabajar con ordenadores. Sin embargo, es importante tener en cuenta que las gafas progresivas pueden llevar a tomar un cierto tiempo de adaptación.

 

Algunas personas pueden encontrar dificultades para enfocar en la zona de visión intermedia y pueden sentirse mareadas o tener problemas para ver con claridad, así que cabe la posibilidad de no son la mejor opción para ese caso determinado.

 

Es importante hablar con un optometrista para determinar si las gafas progresivas son la opción adecuada para esa persona. Es posible que se necesiten pruebas de visión y un examen ocular para evaluar la necesidad de gafas progresivas y para determinar la prescripción adecuada.

¿Qué diferencia hay entre las gafas progresivas y las bifocales?


Hay que decir que son dos tipos de lentes que se utilizan para corregir la vista en personas que tienen problemas de cerca y de lejos. Sin embargo, hay algunas diferencias clave entre ellas.


Las gafas progresivas tienen una zona de visión intermedia y una zona de visión cercana, lo que permite a las personas usarlas para ver tanto de cerca como de lejos sin tener que cambiar de gafas. La transición entre la zona de visión cercana y lejana es gradual, lo que significa que no hay una marcada división entre las dos zonas como hay en las gafas bifocales. Esto hace que las gafas progresivas sean más naturales de usar y menos evidentes.


Las gafas bifocales, por otro lado, tienen dos zonas de visión claramente definidas: una zona de visión cercana en la parte inferior de las lentes y una zona de visión lejana en la parte superior. La división entre las dos zonas se conoce como línea de demarcación y puede ser visible a simple vista. Esto puede ser incómodo para algunas personas y puede tomar un tiempo acostumbrarse a usar gafas bifocales.


En resumen, las gafas progresivas son lentes correctivos que permiten ver de cerca y de lejos sin cambiar de gafas y tienen una transición gradual entre las zonas de visión cercana y lejana. Las gafas bifocales tienen dos zonas de visión claramente definidas y una línea de demarcación visible.